El Estado mexicano visto desde la economía

Publicado el 2 de marzo de 2018

Daniel Gámez Macías
Alumno de la maestría en Derecho,
Universidad Autónoma de San Luis Potosí,
danielgamez2004@hotmail.com

¿Es posible mirar al estado Mexicano desde otra perspectiva que no tenga nada que ver con la Política y el Derecho?, o solo existe una solo visión para analizar los fenómenos que se desarrollan en torno a este ente omnipresente y controlador que es parte de la vida de todos los mexicanos y rige las reglas de convivencia en este país.

Lo anterior puede ser posible si analizamos la estructura del estado, Carlos Marx definía este concepto como un diseño polisémico de las ciencias sociales, es decir es la base o infraestructura, que se opone a la súper estructura político –ideológica, dicha estructura comprende las relaciones entre los diversos sectores de la economía, a partir de los cuales podemos observar las relaciones de poder entre el estado y los diversos agentes económicos.

Relaciones que no solo se quedan en el campo económico, sino que trascienden más allá de una mera relación de comercio y modifican aspectos legales y políticos que afectan de alguna manera las relaciones entre particulares, así como la forma en que se relacionan el estado y los ciudadanos.

De tal suerte que si analizamos los fenómenos Económicos de nuestro país encontraremos una relación entre la economía y los diversos agentes políticos y sociales que conforman esta nación.

Si bien es cierto, en la actualidad, en México, es posible encontrar voces que señalan que el estado mexicano es un estado fallido, esto debido a los altos índices de inseguridad y corrupción que se viven en gran parte del territorio mexicano, lo que sumado a la pérdida de poder adquisitivo por parte de la población y la sistemática violación de derechos humanos que sufre la población por parte de algunas autoridades mexicanas en los distintos niveles de gobierno , han generado un malestar ciudadano que ha llevado a algunos a considerar que el estado ha comenzado a dejar de lado sus obligación de brindar seguridad jurídica y económica para el buen desarrollo del ciudadano, bien sea esto por incapacidad o simplemente por falta de voluntad, ha permitido que algunos sectores de la población se sientan en estado de indefensión, pues consideran que el estado renuncio a otorgarles estas garantías, pero, ¿es verdad esta aseveración?.

Si analizamos las cifras macro económicas otorgadas por distintos organismos públicos y privados que se han dado a la tarea de revisar estas cifras desde hace ya algunos años, tal aseveración parecería incorrecta, ya que durante los tres últimos sexenios, la economía mexicana ha permanecido estable y con un porcentaje de crecimiento permanente, que aunque pequeño, ha permitido que la población goce de tranquilidad económica a diferencia de lo que se vivía en sexenios anteriores, cuando además de los problemas señalados anteriormente, también se sufría de crisis económicas recurrentes y temas como democracia, transparencia y rendición de cuentas no existían en el vocabulario de las autoridades mexicanas.

En la actualidad, el país cuenta con un crecimiento sostenido de 1.9 % anual y un PIB (producto interno bruto) de 945,228 millones de Euros, siendo además la economía número 15 de 196 países que actualmente son evaluados por esa medida (www.banxico.org.mx/politica-monetaria-e-inflacion/index.html ), lo cual no se explicaría sin una fuerte presencia del estado mexicano en la economía mediante el impulso a las denominadas reformas estructurales, así como la implementación de nuevas leyes y regulaciones que permitan el desarrollo económico del país sin atentar contra su soberanía

De tal manera que podemos considerar que de los tres elementos fundamentales de todo estado como lo son, territorio, población y soberanía, en ninguno de ellos ha fallado el estado mexicano, los dos primero podemos considerar que no habrán de desaparecer en virtud de que se cuentan como elementos intrínsecos en la definición de México como país, mientras que el ultimo denominado soberanía bien puede ser explicado por la economía.

Y aunque como toda economía emergente se encuentra sujeto a las políticas de las grandes economías hegemónicas, al contar con solides dentro del sistema económico mexicano, el estado ha podido hacer frente a otros desafíos de tal manera que este año el gobierno federal ejercerá un presupuesto de $4,837, 512.3 millones de pesos (www.transparenciapresupuestaria.gob.mx/work/models/PTP/Home/PEF2017/PEF_2017.pdf), para temas como transparencia, combate a la corrupción y seguridad pública, mismo que tiene como objetivo disminuir e rezago en estas materias.

De tal suerte que es posible afirmar que el país es una economía creciente que no se explicaría si no existiera la intervención del estado mexicano en la economía creando regulaciones que nos permitan el libre mercado y evitando los monopolios, con lo que se reafirma el principio de soberanía de tal manera que es posible explicar al estado mexicano a través de su economía y aunque actualmente enfrenta como todos los países problemas políticos y sociales que atentan contra su soberanía, el contar con una economía sólida le permite mantener su independencia como país y reafirmando el mandato que le fue conferido en la constitución política de los estados unidos mexicanos.

Formación electrónica: Luis Felipe Herrera M., BJV
Incorporación a la plataforma OJS, Revistas del IIJ: Ignacio Trujillo Guerrero