La teoría de género: ¿una desviación social?

Publicado el 12 de junio de 2019

Antonio Tristán Rodríguez
Maestro en Derecho por la Universidad Autónoma de San Luis Potosí,
emailantoniotristan@hotmail.com

Actualmente se han puesto sobre la mesa con mayor frecuencia temas sobre la teoría de género; la mirada a nivel social se ha enfocado a darle mayor importancia a estos temas y en general darle al mundo una perspectiva de género; no siempre lográndolo de la mejor manera, pero siempre justificado por una buena causa.

Una realidad es que la teoría de género no es algo nuevo, tiene una larga historia, la cual comienza con los movimientos realizados por ciertos grupos de mujeres que tenían como objetivo romper con el patriarcado marcado en la sociedad, darle un lugar o, mejor dicho, reconocer el papel coprotagonista que la figura femenina ha tenido para la evolución y desarrollo de la sociedad; es por ello que muchas veces al hablar de la teoría de género nos enfrascamos en hablar de grupos feministas, siendo que la teoría de género va más allá de una simple discusión para romper con las diferencias biológicas entre hombres y mujeres; dentro de la teoría de género se estudia y definen aspectos tanto biológicos (y no para dar superioridad a ninguno de los sexos, sino para dejar claro que las diferencias no hacen ni más ni menos a una persona) como aspectos sociales, culturales e incluso políticos.

Actualmente es un error pensar que la teoría de género se limita a ser un movimiento feminista, a pesar de que en sus inicios eran este tipo de movimientos quienes daban mayor poder y quienes impulsaban a conseguir un cambio radical dentro de la sociedad; actualmente esta idea ha ido cambiando, enriqueciéndose y abriendo brecha dentro de la mentalidad y forma de vida conservadora a diversos tipos de sociedades; en la actualidad, al hablar de género se debe hablar desde una idea completa de las personas, el género no se limita solamente en hacer una distinción entre sexo, sino que debe tomarse en cuenta todo lo relacionado con cada persona, todas aquellas construcciones sociales y mentales con la que ésta cuenta, el entorno en el que se desarrolla, gustos, preferencias que adquiere y reafirma la persona, entre otras cosas, son todo un conjunto que abre en realidad el concepto de género.

Estos cambios y estas nuevas mentalidades que se unen a la teoría de género en muchas ocasiones son vistas como personas que rompen con el molde de lo “normal” en la sociedad y que al ir en contra de esta “normalidad” social trasgreden la cultura y el orden que predomina dentro de la misma sociedad, dando origen a la pregunta base del presente artículo: ¿es la teoría de género una desviación social?

La desviación social es un comportamiento que rompe con el comportamiento que el general de las personas tienen como expectativa y al ser contraria a dicha expectativa ocasiona que exista una desaprobación hacia ese comportamiento desviado; la desviación social es un actuar diferente al que la sociedad tiene aprobado o un comportamiento visto correcto, arraigado desde su cultura, las propias creencias de la población y aquel sujeto que trasgreda cualquier tipo de estas formas de conducirse en la sociedad será visto como una conducta desviada.

Es por ello que se llega a la conclusión personal de que al hablar de teoría de género sí se debería considerar como una desviación social, ya que, como se ha dicho, ésta inicio con movimientos en su mayoría feministas y éstos a su vez rompían un orden, una cultura y una forma social determinada; no con ello digo que al ser considerada la teoría de género como una desviación social sea mala, incorrecta o innecesaria; por el contrario, es una desviación positiva al tener una verdadera razón de ser, así como un objetivo claro y correcto que beneficia a la sociedad.


Formación electrónica: Yuri López Bustillos, BJV
Incorporación a la plataforma OJS, Revistas del IIJ: Ilayali G. Labrada Gutiérrez