Renuncias en blanco1

Publicado el 20 de septiembre de 2021

José Dávalos Morales
Exdirector de la Facultad de Derecho de la UNAM, profesor de Derecho del Trabajo
email josedavalosmorales@yahoo.com.mx

El legislador mexicano hizo justicia a los trabajadores en las reformas del 1o. de mayo de 2019, entre otras cuestiones importantes, al poner su atención y quitar toda validez a la alteración de un documento firmado por el trabajador con un fin distinto en el que se incorpora su renuncia, y a que le exijan la firma en hojas en blanco al entrar a trabajar o en cualquier otro momento.

En el artículo 48-Bis, de la Ley Federal del Trabajo el legislador escribió que se consideran actuaciones notoriamente improcedentes, inciso b) Alterar un documento firmado por el trabajador con un fin distinto para incorporar la renuncia, e inciso c) Exigir la firma de papeles en blanco en la contratación o en cualquier momento de la relación laboral.

Ambos hechos son muy socorridos abusando de la necesidad que el trabajador tiene del trabajo, sobre todo cuando lleva meses sin recibir un salario por su trabajo para dar a su familia lo que necesita para comer, para vestir, para vivir bajo un techo.

Se alegra el trabajador de que ya va a tener una ocupación, y cuando llega al centro de trabajo le ponen enfrente varias hojas que debe firmar, entre esas hojas va una en blanco que también debe firmar. Posteriormente, cuando él menos lo esperaba resulta que su jefe le dice que el trabajo se acabó por la renuncia que firmó “voluntariamente”, porque así aparece en el texto que pusieron.

El trabajador firmó aquella hoja en blanco, porque comprendió que si no lo hacía no le daban el trabajo. Cosa semejante ocurre cuando en una hoja que tenía un texto diferente, de pronto aparece en esa hoja el texto de su renuncia calzada con su firma. Era una hoja donde se decía que él estaba recibiendo una herramienta, cuando después se la muestran ya decía que a partir de tal fecha renunciaba voluntariamente al trabajo.

El trabajador cuando se presenta ante el Tribunal del Trabajo manifiesta que su deseo jamás ha sido de renunciar al trabajo. En su defensa, el trabajador ofrece la confesión de su patrón y también ofrece el testimonio de tres compañeros de trabajo que aseguran jamás haber visto y sabido que el trabajador pusiera y firmara su renuncia.

El abogado del trabajador tiene que poner su inteligencia en la defensa de este trabajador, como hay tantos casos en el país. El juez a fin de cuentas sabrá imponer el derecho y la justicia.


NOTAS:
1 Se reproduce con autorización de el autor, publicado en La Prensa, el 31 de julio de 2021.


Formación electrónica: Yuri López Bustillos, BJV
Incorporación a la plataforma OJS, Revistas del IIJ: Ignacio Trujillo Guerrero