No todo es la geopolítica. Sobre la guerra en Ucrania

Publicado el 4 de mayo de 2022

Lukasz Czarnecki
Universidad Pedagógica de Cracovia
lukasz.czarnecki@up.krakow.pl

Existe una perspectiva (equivocada) de la izquierda latinoamericana de mirar al conflicto ruso-ucraniano como el espejo de las relaciones geopolíticas y la confrontación bipolar de Estados Unidos.

Sin embargo, no todo es la geopolítica. No todo son relaciones internacionales y confrontación de las potencias. No todo es mirar a través de las lentes de grandes poderes, bloques u organizaciones. Desde esta perspectiva se analizan los ductos por donde fluye el gas y el petróleo.

Algunos consideran que “la culpa es de la OTAN”, brazo militar de Europa y de los Estados Unidos, haciendo uso de su poder militar y político. Se dice que el tema de la guerra en Ucrania es el creciente poder imperial americano desde hace varias décadas, y más recientemente desde la caída del muro de Berlín, “quiere reducir a Rusia a una nación acorralada y sumisa, nulificar su menguada pero todavía viva capacidad imperial”. Todavía más: “Hay una intención, abierta, de convertir a Rusia en una gran pequeña nación occidentalizada que no haga competencia al imperialismo americano, del tipo Francia o el Reino Unido” —esto me lo dijo un investigador emérito de Mérida, México—.

No es así. Porque existe un tipo de barbarie del Estado ruso del cual sólo Gengis Kan comprendería, tal vez, la crueldad. Por mencionar solamente algunos hechos: en 1794 la emperatriz rusa Catalina “la Grande” ordenó la matanza de la mitad de Varsovia, así como la destrucción total del Reino de Ambas Naciones Polaco-Lituano; como consecuencia murieron entre 13 y 20 mil personas. En 1932 ocurrió en Ucrania la Gran Hambruna-Holodomor, considerada como un genocidio propiciado por el Estado bolchevique en el que murieron entre dos y cuatro millones de personas; el objetivo era exterminar a la gente. En 1940 Stalin ordenó la matanza de 22 mil soldados y de la elite intelectual polaca (la masacre de Katyn). Recientemente, en este 2022, Putin ordenó la matanza de la gente civil e inocente en Bucha, Ucrania, como un acto de terror y venganza.

La memoria colectiva muestra que la barbarie humana del Estado ruso tiene su long durée, frente a la cual la explicación racional se queda impotente.

Matanza de Varsovia (del suburbio de Praga), 1795, disponible en: https://digitalcollections.nypl.org/items/510d47de-0d71-a3d9-e040-e00a18064a99.

Formación electrónica e incorporación a la plataforma OJS, revistas del IIJ: Ignacio Trujillo Guerrero, BJV