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Las aportaciones de Alfonso Caso a la cultura

Publicado el 25 de octubre de 2022


Adriana Berrueco García

Investigadora del Instituto de Investigaciones Jurídicas, UNAM,
email adriana_berrueco@yahoo.com.mx

El pueblo del sol es un libro clásico de la cultura indígena mexica o azteca, se publicó por primera vez en 1953, y hasta 2012 el Fondo de Cultura Económica había editado 24 reimpresiones de la misma. Alfonso Caso Andrade, autor de El pueblo del sol, fue uno de los pilares de la investigación sobre las sociedades precolombinas asentadas en nuestro país. Pero la figura de este abogado está estrechamente vinculada con el desarrollo de la cultura mexicana por otras acciones. A 52 años del fallecimiento de este importante intelectual es pertinente recordar su trabajo en la edificación de instituciones educativas y de investigación que en la actualidad continúan siendo baluartes de nuestra nación, además se debe dar difusión a las aportaciones que Caso realizó en el ámbito de la arqueología. Estos son los objetivos del presente artículo.

Nació en la Ciudad de México el 1 de febrero de 1896. Realizó la carrera de abogado en la Escuela Nacional de Jurisprudencia de la Universidad Nacional de México. Su interés por la arqueología surgió después de una visita que realizó a Xochicalco, en el estado de Morelos. Después de ello asistió a cursos de arqueología en la Escuela de Altos Estudios (hoy Facultad de Filosofía y Letras) de la Universidad Nacional, tomó clases con Hermann Beyer.

En 1925 publicó su primer artículo de temas históricos, denominado “Un antiguo juego mexicano: el patolli”. En tanto, su primer artículo de tema arqueológico fue “Nota arqueológica sobre las ruinas de de Tizatlán, Oaxaca”, publicado en 1927. En este mismo año fundó la Revista Mexicana de Estudios Antropológicos.

Fue muy extensa su trayectoria dentro de la Administración Pública Federal, en primer término se recuerda que se desempeñó como jefe del Departamento de Arqueología del Museo Nacional (1930), en este cargo se dedicó a describir los códices que integraban la colección del museo. Además, realizó el inventario de la glífica del Grupo de Códices Borgia, tarea en la que fue auxiliado por Eulalia Guzmán y Alberto Ruz, entre otros.

En el ámbito de la arqueología la figura de Caso es reconocida principalmente por las excavaciones que realizó en Monte Albán, Oaxaca, en el periodo 1930-1932, y descubrió la tumba 7, perteneciente al conjunto arquitectónico representativo de la cultura mixteca, del periodo posclásico tardío. Este entierro estaba formado por más de 400 piezas, de las cuales 121 son de oro, entre ellas un pectoral con fechas que en la actualidad es exhibido y preservado en el Museo de las Culturas de Oaxaca. Entre otros objetos sobresale un hueso en el que están labradas magistralmente las figuras de seis animales.

Durante el gobierno del presidente Lázaro Cárdenas, Alfonso Caso propuso la creación del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), junto con Manuel Gamio y José Reygadas, en 1938. Al crearse este Instituto, en 1939, fue su primer director, y estuvo en el cargo hasta 1944. En 1948, el régimen del presidente Miguel Alemán creó el Instituto Nacional Indigenista del cual también fue fundador Caso y lo dirigió durante 20 años. En 2003 el Instituto fue denominado Comisión Nacional para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas, y desde 2018 se transformó en Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas.

El abogado Alfonso Caso tuvo una intensa y fructífera misión dentro de la Universidad Nacional Autónoma de México. Ejerció el cargo de director de la Escuela Nacional Preparatoria en 1938; en esta entidad impartió clases de Lógica. Fue rector de la UNAM del 15 de agosto de 1944 al 24 de marzo de 1945, en este lapso instaló en Consejo Constituyente encargado de discutir y analizar la Ley Orgánica de la UNAM y su Estatuto. La Comisión encargada de crear el proyecto de Ley Orgánica estuvo presidida por el doctor Antonio Carrillo Flores. El Congreso de la Unión aprobó el proyecto de ley presentado por Caso, mismo que se publicó en el Diario Oficial de la Federación el 6 de enero de 1945.

Finalmente, se debe destacar que este distinguido universitario obtuvo la distinción de ser miembro fundador del Colegio Nacional, al cual ingresó el 15 de mayo de 1943. En 2007 esta institución publicó el libro de don Alfonso titulado Calendarios, códices y manuscritos antiguos: zapotecas y mixtecas. Falleció el 30 de noviembre de 1970 y sus restos mortales descansan en la Rotonda de las Personas Ilustres.


Formación electrónica: Yuri López Bustillos, BJV
Incorporación a la plataforma OJS, Revistas del IIJ: Ignacio Trujillo Guerrero