Límites y ausencias del Pacto por México en Seguridad y Justicia

Publicado el 29 de enero de 2012

Alberto Espejel Espinoza, doctorando en Ciencia Política de la UNAM
alberto.espejel.esponoza@gmail.com
Mariela Díaz Sandoval, doctora en Ciencias Sociales por FLACSO
mariela.diaz@flacso.edu.mx

Unos de los principales temas que preocupa a la sociedad mexicana es el de la inseguridad y violencia que se vive en el país, misma que ascendió a niveles estratosféricos en el sexenio de Felipe Calderón y que a su vez fue la causa de que el voto de castigo hacia el panismo no fuera la situación económica, sino los malos resultados en materia de seguridad (Salazar, 2012).

El problema de la inseguridad es un problema de grueso calado. Tratarlo, por tanto, no es sencillo, ya que supone la puesta en marcha de un enfoque integral, del uso eficiente de recursos materiales y humanos, de una visión a corto, mediano y largo plazo y, sobre todo, del respeto a los derechos humanos (UNAM, 2011).

Actualmente en México atravesamos por una aguda crisis de seguridad creada por la errada estrategia de parte de los gobiernos federales y estatales que prefieren atacar los síntomas en vez de enfocarse en las causas de la inseguridad y la violencia. Hemos alimentado el crecimiento de penas, policía, ejército, represión y cárceles, incluso erradamente a nuestros jóvenes, y el resultado ha sido un desmedido aumento de la violencia y la inseguridad.

¿Cuáles han sido los resultados obtenidos? Sin duda, magros, la violencia e inseguridad en México creció de forma estratosférica en el sexenio de Felipe Calderón, por ejemplo, los homicidios dolosos relacionados con el crimen organizado han aumentado considerablemente, como se aprecia de 2,766 en 2007 a 16,603 en 2011 (Guerreo, 2012). De ese total se estima que el 10% son civiles inocentes. También han aumentado el robo y el secuestro (Mitofsky, 2012).

Asimismo, a dicha apuesta punitiva o represiva le hemos dedicado bastantes recursos económicos. Como afirma Cortéz, tan solo en 2009 se gastaron 104,907 millones de pesos para el funcionamiento de las secretarías de Defensa Nacional, Marina, Procuraduría General y Secretaría de Seguridad Pública federal, un monto que equivale a más de la mitad de lo que se destina a la Secretaría de Educación Pública (2010: 33).

Ahora bien, para superar el problema debemos tener conocimiento de qué genera la violencia e inseguridad en México, conocemos de sobra su manifestación (número de delitos, homicidios dolosos relacionados con el crimen organizado y auge de la delincuencia organizada), pero los gobernantes dan pocas pistas de que saben las causas. En este aspecto varios autores y organismos internacionales han coincidido en que existen tres tipos de problemas que generan la violencia e inseguridad en México:

a) Ámbito institucional: se refiere a problemas profundos de las instituciones policiales, de procuración, de administración de justicia, y de reinserción social, tales como: ausencia o precaria coordinación y organización, aunadas a la corrupción, impunidad y falta de rendición de cuentas (Medina, 2011).

b) Ámbito estructural: se refiere a la falta de oportunidades de educación, salud, vivienda, trabajo digno y bienestar general en amplias capas de la población, principalmente nuestros jóvenes (Pérez, 2006).

c) Implementación: se refiere a las deficiencias de una estrategia errada que, ante las confusiones conceptuales, institucionales y estratégicas, tiene a nuestro país en un periodo de encono social, con resultados y efectos no deseados y lejanos a nuestra aspiración de un Estado de derecho (UNAM, 2011).

¿Qué propone el nuevo gobierno encabezado por Enrique Peña Nieto? El pasado 2 de diciembre de 2012, Jesús Zambrano (dirigente nacional del PRD), Gustavo Madero (dirigente nacional del PAN), María Cristina Díaz Salazar (dirigente nacional del PRI) y Enrique Peña Nieto firmaron el Pacto por México, “que comprometa al gobierno y a las principales fuerzas políticas dispuestas a impulsar un conjunto de iniciativas y reformas, para realizar acciones efectivas para que nuestro país mejore.1

¿Qué ausencias presenta el Pacto por México, de acuerdo las causas de la inseguridad? Respecto al inciso a no se plantea nada serio respecto a la corrupción. Lo cual dice mucho de lo que no se quiere mover, por ejemplo la corrupción público-privada y las huellas del lavado de dinero que quedan en bancos, empresas, constructoras, inmobiliarias, etcétera. Es más, "lavado de dinero" no aparece en el documento, por lo cual es claro que hay poca disposición de atacar uno de los principales recursos del crimen organizado. La reforma a los cuerpos policiales no incluye el dotarlos de salarios dignos, ni de romper los círculos de corrupción al interior de las corporaciones policiales. Hablando de la reforma judicial 2008, no se toca en absoluto el tema del arraigo, contrario a los derechos humanos como ha sugerido la CNDH. Ni siquiera en el apartado de derechos humanos. Cuando tocan el sistema penitenciario se plantea dividir reos con delitos federales de los no federales, en vez de plantear determinar y tratar los delitos de acuerdo a sus causas y consecuencias. No se diferencia la drogadicción del narcotráfico, por ejemplo.

En torno al inciso b no está claro si la apuesta preventiva superará a la punitiva en términos del presupuesto. No hay un compromiso claro, ni montos sobre el incremento de presupuesto en materia de prevención, ni tampoco una reducción de lo destinado a las secretarías dedicadas al ramo de seguridad, tampoco hay grandes compromisos que refieran a mejores oportunidades laborales para los jóvenes (salvo Beca-Salario, del cual se dice casi nada), ni tampoco está claro si habrá una verdadera participación ciudadana en el diagnóstico, la implementación y, sobre todo, la evaluación de las políticas. A lo más se habla de invitar a personajes destacados (sic) de la sociedad civil organizada.

Finalmente, respecto al inciso c queda muy claro que seguimos en la misma miopía institucional, ya que la reciente reforma laboral no tomó en cuenta los efectos en materia de seguridad de acuerdo a su impacto en el ámbito estructural. Algo similar sucede con algunas otras propuestas del Pacto por México que más que medidas integrales, parecieran propuestas sueltas. Prueba de esa miopía institucional es que el apartado de seguridad es permeado por el mismo discurso usado por Calderón de: ellos los malos (crimen organizado), nosotros los buenos (SEDENA, SSP, SEGOB, PGR, etcétera). Asimismo, no existe ninguna apuesta por implementar una de las lecciones internacionales: la solución está a nivel local (municipal). 

Así pues, la propuesta y su alcance está en duda, debido a que no ataca una serie de cuestiones fundamentales (ataque al lavado de dinero, reducción del gasto en secretarías de dedicadas a la seguridad, importancia del ámbito municipal, entre las principales); aunado a esto, algunas de las propuestas resultan demasiado incompletas, a lo más son un listado de buenas intenciones (aumento de prevención sin presupuesto específico, aumento de oportunidades laborales a los jóvenes, participación ciudadana en implementación y evaluación de políticas, entre otras), de no mejorarse las propuestas y contenidos incluidos es poco probable que la inseguridad y violencia en México se reduzcan.

Bibliografía

• Salazar-Elena, Rodrigo, 2012, “El voto por el PAN: el voto económico y la política  de combate al narcotráfico”, Revista Posibilidad Política, México, núm. 2, pp. 80-85.
• Universidad Nacional Autónoma de México, 2011, Elementos para la Construcción de una Política de Estado para la Seguridad y la Justicia en Democracia, México, UNAM, Documento disponible en: www.unam.mx/contenidoEstatico/archivo/files/pdfs/propuesta_s.pdf
• MITOKSKY, 2012, Décima Encuesta Nacional sobre Percepción de Inseguridad Ciudadana en México, México, Mitofsky, Disponible en: mucd.org.mx/recursos/Contenidos/EncuestaMitofskydePercepcinCiudadanasobrela/documentos/10%20Encuesta%20%20%20Mitofsky%20completa.pdf
• Guerrero, Eduardo, 2012, “Políticas de seguridad en México: el último cuarto de siglo”, Confluencia XXI, México, núm. 17, abril-junio, 19-31.
• Cortéz, Edgar, 2010, “¿Seguridad ciudadana inalcanzable?”, en Instituto Mexicano de Derechos Humanos y Democracia, Seguridad Ciudadana y Derechos Humanos, México, IMDHD, 29-36. Disponible en: www.redtdt.org.mx/media/descargables/Seguridad%20Ciudadana%201.pdf
• Medina, Mayolo, 2011, “La seguridad pública y el ogro filantrópico”, Confluencia XXI, México, núm. 14, julio-septiembre, 21-33.
• Pérez, Agustín, 2006, “La prevención delictiva en un ambiente de conflicto social”, en Pavarini, Massimo et al., Seguridad Pública. Tres puntos de vista convergentes, México, Coyoacán.

NOTAS:
1. Véase: pactopormexico.org/quienes/