Los desafíos de la educación en México

Publicado el 13 de mayo de 2014

Gustavo Eduardo Castañeda Camacho
Asistente de investigación en el Instituto de Investigaciones Jurídicas
@GustavoECC
gustavo.castaneda@outlook.com

El siguiente texto, como su nombre lo indica, aborda los principales retos por afrontar y metas que tiene que alcanzar el sistema educativo mexicano. Si bien es cierto que se han logrado avances importantes en la ultima década en cuanto al fortalecimiento y ampliación de la red educativa, también es necesario señalar que hacen falta trascendentales reformas para mejorar la educación en México.

En las próximas líneas explicaré sucintamente en 4 tópicos torales, los principales retos que debe enfrentar el sistema educativo, así como las propuestas para optimizar la educación.

1.- Aumentar la cobertura educativa

El sistema educativo de México es uno de los más grandes y complejos de la OCDE, es por ello que la extensa cobertura de la educación obligatoria ha sido un gran logro. Desde que se instauró la obligatoriedad de la educación preescolar en 2009, México ha alcanzado una de las tasas de matrícula más altas entre los niños de 4 a 14 años en la OCDE, lo que lo sitúa en la posición 4 entre 38 países.

A pesar de este gran esfuerzo, sólo el 54% de los mexicanos de 15 a 19 años se hallan inscritos en el sistema educativo, por lo mismo, se debe trabajar con el objetivo de aumentar el acceso a los estudios de nivel media superior.

Cabe resaltar que el Estado mexicano ha tomado cartas en el juego, toda vez que se instituyó como obligatoria la educación media superior, estableciendo el año 2022 como fecha limite para alcanzar la cobertura total.

En relación con la educación superior también se ha avanzado de manera significativa, sin embargo sigue siendo paupérrima la cobertura en comparación a la generalidad de los países de la OCDE. Es preciso mejorar la calidad de la educación superior por medio de un esquema bien desarrollado que circunscriba controles de calidad internos y externos, así como compartir los costos de la educación superior entre estudiantes-contribuyentes, ya que la mayor parte de los costos son cubiertos por el gobierno. Un elemento fundamental para lograrlo es a través de un sistema universal de crédito estudiantil. Con lo anterior quiero decir que compartir los costos permitiría que México siga creciendo en cobertura sin sacrificio de calidad de la instrucción.

2.- Certificar la calidad de la educación

Una meta para nuestro país corresponde a garantizar que la educación obligatoria realmente otorgue calidad y calidez a los estudiantes mexicanos.

Por ejemplo, en la prueba PISA 2009, aproximadamente el 40% de los estudiantes de 15 años alcanzaron resultados menores al Nivel 21 en lectura, lo que representa la proporción más grande en los países de la OCDE.

Con el propósito de fomentar el desarrollo educativo, el gobierno estableció metas de rendimiento para el año 2012 de un promedio mixto de 435 puntos, no obstante que el objetivo a todas luces es insuficiente e inferior al promedio de la OCDE de 500 puntos, se han logrado mejoras, como es el caso de las matemáticas (materia en la que México registró el mayor progreso absoluto de 33 puntos entre 2003 y 2009).

  1. Optimizar el ambiente para la enseñanza y el aprendizaje

    El contexto en el que se imparte la educación en México es característicamente difícil y es necesario mejorarlo. Precisamente nuestro país ha cobijado medidas tendientes a mejorar la educación que se ofrece en las escuelas. Entre estas decisiones se encuentran las siguientes:

  2. Contar con una mejor planta docente en todos los niveles educativos

    La preparación adecuada y eficaz del magisterio es decisiva para prosperar en la calidad de la educación. Para que las reformas gocen el impacto deseado en el aprovechamiento escolar de los estudiantes, se han tomado las siguientes determinaciones:

  3. Evaluar para aumentar la calidad

    Las siguientes son algunas iniciativas que el país ha llevado a cabo.

  4. Tener mejores condiciones para que funcionen las reformas

    A fin de certificar que los esfuerzos por mejorar la eficacia en la educación logren los efectos previstos es substancial organizar los incentivos, introducir coherencia e interconexiones en la toma de decisiones, fortalecer la capacidad de implementación y reducir los niveles de opacidad. Por ejemplo:

Indiscutiblemente de particular importancia es la decisión de no permitir  al SNTE involucrarse en el nombramiento y asignación de plazas docentes.

3.- Destinar de forma adecuada los recursos

Al parejo de los demás países de la OCDE, el gasto en educación en México se ha elevado como proporción del PIB, de manera puntual me refiero a que entre 2000 y 2009, se aumentó su gasto en los niveles de primaria, educación media, media superior y carreras técnicas en un 30 % en razón de que el número de estudiantes creció. Por lo que se refiere al nivel superior, México aumentó el gasto en un 69% en el mismo periodo.

México es uno de los países que en PISA 2009 tiene una correspondencia estrecha entre la disponibilidad de recursos en las escuelas y el nivel socioeconómico de su matrícula por lo que en pocas palabras es necesario distribuir de manera más equitativa y equilibrada los recursos a las escuelas con base en sus antecedentes socioeconómicos.

4.- Recomendaciones claves de la OCDE.

La OCDE exhorta a una agenda de políticas públicas encaminada al ejercicio, para que las escuelas, los directores y los docentes en México reciban un mejor y mayor apoyo hacia el desempeño de sus tareas. Para ser específicos, esto implica:

En conclusión, México debe trabajar en el fortalecimiento de las capacidades en los diferentes niveles, clarificar la distribución de responsabilidades en el sistema descentralizado y la institucionalización de mecanismos transparentes para el debate y construir consensos con todos los actores relevantes en las reformas.

NOTAS:
1. PISA 2009 describe el desempeño de los estudiantes en términos de siete niveles de competencia en lectura. El nivel 2 está considerado como el nivel básico de aptitud en el que los estudiantes comienzan a demostrar las competencias de lectura que les permitirían participar de manera efectiva y productiva en la vida.