Refundar el Estado*

Publicado el 23 de octubre de 2014

Ricardo Hernández Montes de Oca
Politólogo y Maestro en Derecho por la UNAM
rhmontesdeoca@gmail.com

¿Qué hacer? En estos tiempos de crisis en nuestro país es la única pregunta que se me ocurre, desafortunadamente no tengo la respuesta. Los hechos recientes ocurridos en Ayotzinapan reflejan una sociedad descompuesta, el Estado ha sido rebasado o cooptado por los poderes fácticos, las personas hemos perdido la capacidad de asombro, el poder está difuminado ¿Qué hacer?

Quizás una respuesta es exigirle al Estado, pero el Estado somos todos, entonces ya es hora de empezar a exigirnos todos, dejar de lado nuestro desinterés en la cosa pública, y no solo preocuparnos por ella, sino ocuparnos... pero si el Estado es y ha sido incapaz de proporcionarnos diversos satisfactores sociales (empleo, salario digno, educación, vivienda...) resulta poco atractivo pedirle algo nuevo a quien no ha proporcionado lo básico.

Cómo explicarnos un hecho como el de Ayotzinapa luego de Aguas Blancas, de Acteal, del 68 y del 71, de los movimientos sociales de los setenta del siglo pasado, del levantamiento del EZLN, y de casos más recientes como el “Campo Algodonero”... acaso el Estado no ha aprendido nada, o es que no le importa nada...

Con gobernantes irresponsable, corruptos, que solo les importa el poder, pero con ciudadanos apáticos, que no se ocupan de la cosa pública, la situación se torna más complicada, la solidaridad, que debería ser propia de los Estados modernos cada vez está más difuminada, aquella idea contractualista de ceder soberanía a cambio de seguridad, pero de seguridad para todos, está perdida, “mientras a mí no me pase nada, no me importa lo que le pase al otro”, pensamos, sin darnos cuenta que mañana podemos ser nosotros las víctimas de estas circunstancias...

En pleno siglo XXI donde deberíamos tener democracias de calidad, estamos llegando a niveles lamentables de degradación social (y degradación estatal), y de nuevo aparece la pregunta inicial ¿qué hacer? La desobediencia civil quizá sea una vía, la manifestación, la protesta social, algo tenemos que hacer para demostrar que no estamos conformes con lo que sucede, que no somos una sociedad apática, que cada que sucede algo seamos capaces de obtener respuestas y no solo plantearnos preguntas...

Y es cuando creo que ya llegó el momento de refundar el Estado, y que el camino es la Revolución, pero una Revolución general, que no implica necesariamente la vía armada, hay que refundar al Estado desde las bases. Plantearnos una refundación constitucional, donde los poderes fácticos sean sujetos y estén sujetos al derecho, donde los organismos internacionales no “tiren línea” en materia económica, donde se planteen mecanismos que nos proporcionen satisfactores sociales a todos, donde las nuevas generaciones tengan posibilidad de igualar o rebasar la situación económica de sus padres... solo así podremos tener una nueva sociedad, un Estado del cual estemos orgullosos...

#TodosSomosAyotzinapa.